La primera evidencia de vida en la Tierra proviene de esteras fosilizadas de cianobacterias llamadas estromatolitos en Groenlandia que tienen unos 3.700 millones de años. Por antiguos que sean sus orígenes, estas bacterias (que todavía existen hoy en día) ya son biológicamente complejas: tienen paredes celulares que protegen su ADN productor de proteínas, por lo que los científicos piensan que la vida debe haber comenzado mucho antes. De hecho, hay indicios de vida en rocas aún más primitivas: Circones de 4.100 millones de años de edad de Australia Occidental contienen grandes cantidades de una forma de carbono típicamente utilizada en procesos biológicos.
Pero a pesar de saber aproximadamente cuándo apareció la vida en la Tierra, los científicos aún están lejos de responder cómo apareció.
Se han propuesto muchas teorías sobre el origen de la vida, pero como es difícil probarlas o refutarlas, no existe una teoría totalmente aceptada. La respuesta a esta pregunta no sólo llenaría una de las mayores lagunas en la comprensión de la naturaleza por parte de los científicos, sino que también tendría importantes implicaciones en la probabilidad de encontrar vida en otras partes del universo.
Muchas ideas
Hoy en día, hay varias teorías que compiten por la forma en que surgió la vida en la Tierra. Algunos se preguntan si la vida comenzó en la Tierra, afirmando en cambio que vino de un mundo distante o del corazón de un cometa o asteroide caído. Algunos incluso dicen que la vida pudo haber surgido aquí más de una vez.
Puede haber habido varios orígenes. Normalmente hacemos ‘orígenes’ en plural sólo para indicar que no necesariamente afirmamos que hubo un solo origen, sino sólo un origen que no fue arrasado por impactos gigantes [de asteroides].
La mayoría de los científicos están de acuerdo en que la vida pasó por un período en el que el ARN era la molécula principal, guiando la vida a través de sus etapas iniciales. Según esta hipótesis del “Mundo del ARN”, el ARN era la molécula crucial para la vida primitiva y sólo pasó a un segundo plano cuando se desarrollaron el ADN y las proteínas, que realizan su trabajo de forma mucho más eficiente que el ARN.
Muchas de las personas más inteligentes y con más talento en mi campo han aceptado que el Mundo del ARN no sólo era posible, sino probable.
El ARN es muy similar al ADN, y hoy en día realiza numerosas funciones importantes en cada una de nuestras células, incluyendo la de actuar como una molécula de transición entre el ADN y la síntesis de proteínas, y la de funcionar como un interruptor de encendido y apagado para algunos genes.
Pero la hipótesis del Mundo del ARN no explica cómo surgió el propio ARN. Al igual que el ADN, el ARN es una molécula compleja hecha de unidades repetidas de miles de moléculas más pequeñas llamadas nucleótidos que se unen de formas muy específicas y con patrones. Mientras que hay científicos que piensan que el ARN podría haber surgido espontáneamente en la Tierra temprana, otros dicen que las probabilidades de que tal cosa ocurra son astronómicas.
La aparición de tal molécula, dada la forma en que funciona la química, es increíblemente improbable. Sería una posibilidad única en el universo. Para adoptar este [punto de vista], tienes que creer que fuimos increíblemente afortunados.
Si deseas saber más visita: contactopleyades y descubre un universos.